Sylvester Stallone no solo ejerce el doble papel de productor y actor en Los Mercenarios 3. El inolvidable Rocky Balboa también pilota el avión que está desplazando a sus compañeros de reparto por media Europa de premiere en premiere. Las principales estrellas del filme (Antonio Banderas, Jason Statham, Wesley Snipes y Kellam Lutz) aterrizaron ayer en el aeropuerto de Málaga en un jetcomandado por el actor para presentar su cinta en el Starlite.Llegaban acompañados de la mujer e hijas de Stallone y procedentes de Londres donde habían participado en el estreno mundial de la película. Hoy el séquito volverá a volar con el capitán Stallone rumbo a París y un día más tarde desembarcarán en Colonia (Alemania) para cerrar su gira europea. Con esta medida, Stallone se está ahorrando bastante dinero en vuelos comerciales.
Las estrellas de Hollywood pasaron apenas un día en Marbella pero disfrutaron de lo lindo en el municipio malagueño. Una vez que desembarcaron en la Costa del Sol, los intérpretes pusieron rumbo al exclusivo hotel Los Monteros donde se hospedaron en suitesvaloradas entre los 400 y los 700 euros. Sólo Antonio Banderaspernoctó fuera del complejo hotelero dado que cuenta con una mansión a escasos metros de Los Monteros. El próximo verano podría tener que agenciarse una nueva vivienda en Marbella dado que su divorcio con Melanie Griffith le podría arrebatar su refugio marbellí.
El malagueño sí compartió mesa y mantel con el resto de sus compañeros de reparto en La Cabane, el refinado beach club de Los Monteros. Allí pudieron degustar un arroz negro con cigalas y bogavante mirando al mar. Quedaron tan maravillados que los actores quisieron tener su sesión de maquillaje en el club de playa a pesar de que los responsables del resort ya habían habilitado las habitaciones para tal efecto.
Terminado su banquete con vistas al Mediterráneo, las estrellas pusieron rumbo al Starlite en el nuevo Ford Mondeo, un modelo que todavía no está a la venta. Los responsables de la marca los trajeron directamente desde la fábrica para que fuesen estrenados por Stallone y compañía. La mujer e hijas de Rocky Balboa prefirieron quedarse en el hotel y disfrutar de su spa. Ni siquiera quisieron darse una vuelta por el encantador casco antiguo de Marbella como ya hizo en su día Michelle Obama con sus hijas.