Tras más 20 años en prisión, un agresor sexual que había solicitado la eutanasia ha recibido el visto bueno por parte de un tribunal de apelaciones en Bruselas.
Frank Van Den Bleeken, de 50 años, lleva entre rejas casi 30 años y padece, según él mismo ha señalado, un fuerte delirio sexual. Al no conseguir una terapia eficiente, el reo pidió morir. Un tribunal de apelaciones ha aprobado su solicitud.
En Bélgica se permite la eutanasia no sólo para los enfermos terminales sino para las personas que padecen problemas psíquicos.
fuente:elmundo.es
