ORLANDO ARIAS
Importadores de comestibles del país rechazan la denuncia formulada por la vicepresidenta ejecutiva de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Circe Almánzar, que expresa que las licitaciones que se realizan para la compra de productos en las instituciones públicas, benefician a los importadores en desmedro de esa entidad.
Señalaron que las informaciones proporcionadas por Almánzar, responden al interés que tiene la AIRD de mantener la exclusividad y el monopolio en la venta de los artículos comestibles al Estado, conjuntamente con un oferente, que es quien controla todas las compras.
Alegan que la dirigente de los industriales al parecer desconoce los reglamentos técnicos y de normas del Tratado de Libre Comercio DR-CAFTA, que plantea que los países miembros deben dar a los productos importados del territorio de cualquiera de los miembros un trato no menos favorable que el otorgado a productos similares de origen nacional.
Los denunciantes, quienes pidieron reservas de sus nombres, destacan que los oferentes que expenden sus productos a instituciones estatales obtienen beneficios de un 70%, pero que en cambio los importadores con productos de igual calidad y a menor precio permiten que el Estado se economice altas sumas de dinero.
"No solo los industriales tienen el derecho en este país a ser beneficiados con la compra de comestibles. Nosotros también contribuimos en gran medida con la reducción de la pobreza, al emplear a miles de personas en nuestras empresas, además de que contribuimos con el pago de impuestos al Estado", precisan.
Dijeron que no hay razón para que los industriales se quejen de la participación mediante licitaciones que les dan los Comedores Económicos, el Plan Social y otras instituciones, ya que en un país democrático, el monopolio hay que romperlo para que haya más dinamismo económico y más beneficios.
“En los pliegos de condiciones de las instituciones del Estado existen productos tales como sardinas, gomas navideñas, avena, entre otros que son importados tradicionalmente, pero resulta que éstos no son cuestionados por la AIRD”, sostienen.
Agregan que es necesario que ese monopolio que mantienen los industriales a través de un oferente o comprador específicos, que es quien le suministra los comestibles a las instituciones estatales, desaparezca de Salud Pública, el Plan Social, los Comedores Económicos y de otras instituciones.
Explicaron que "Con los productos que nosotros suministramos al Estado a través de licitaciones, les estamos economizando a esas instituciones más de un 50%, en comparación con los precios que ofertan los oferentes”.
Asimismo, exhortaron a los industriales a competir en buena lid, con mejores precios e igual calidad de los productos, y no estar presionando para que las instituciones desistan de los importadores, con la clara intención de seguir manteniendo el monopolio que le ha permitido obtener cuantiosos beneficios, al sostener una distorsión de los precios reales del producto.
Recordaron que tan solo el Plan Social y los Comedores Económicos licitan anualmente alrededor de mil millones de pesos al año, dejando un espacio que representa un 20% para las pequeñas y medianas empresas (Pymes).
"Lo que quieren los industriales es quedarse con todo el negocio de los comestibles que se distribuyen al Estado, desconociendo el derecho que tienen los importadores a participar de este, como en efecto lo subraya el Tratado de Libre Comercio", agregaron.
Hicieron un llamado al presidente Danilo Medina, a fin de que no se deje llevar por los empresarios de industriales ubicados en la AIRD, ya que éstos lo que están tratando es de bloquear a los importadores para que no sean tomados en cuenta en los concursos o licitaciones llevados a cabo por las instituciones públicas.
