WASHINGTON (Reuters) - El presidente Barack Obama anunció el miércoles una respuesta más coordinada de Estados Unidos para ayudar a rescatar a los rehenes estadounidenses capturados por terroristas y reconoció que el Gobierno había defraudado a los familiares en algunas oportunidades.
Después de una emotiva reunión con los familiares de rehenes ejecutados, Obama dijo: "Les reconocí en privado lo que quiero decir públicamente, que es cierto que hubo veces en donde nuestro Gobierno, a pesar de las buenas intenciones, los ha decepcionado. Les prometí que lo haremos mejor".
El presidente reafirmó la principal postura de la política estadounidense que, a diferencia de algunos aliados, el Gobierno no hará concesiones ni pagará rescates a los secuestradores, al afirmar que esto podría enriquecer a los militantes y alentarlos a realizar más secuestros.
Pero estableció una política más cooperativa en la que el Gobierno trabajará con las familias y dijo que un enviado presidencial especial será designado para coordinar los esfuerzos de seguridad y diplomáticos.
La nueva postura fue asumida seis meses después de recibir quejas de las familias de que sus iniciativas para liberar a sus seres queridos habían sido desalentadas y algunas veces bloqueadas por funcionarios que amenazaron con tomar acciones legales si pagaban rescates de manera privada.
Este nuevo acercamiento, presentado en una directiva presidencial, permite la "comunicación con los captores de parte de nuestro Gobierno, las familias de los rehenes o terceras partes que ayudan a esas familias", dijo Obama a legisladores y funcionarios reunidos en la Casa Blanca.
"Mi mensaje a esas familias fue simple. No vamos a abandonarlas. Vamos a apoyarlas", agregó.
El tema explotó el verano boreal pasado cuando militantes de Estado Islámico vestidos de negro publicaron videos espantosos en redes sociales sobre la ejecución de un grupo de estadounidenses y otras personas capturadas en Siria.
La asesora de seguridad interior de la Casa Blanca, Lisa Monaco, dijo a periodistas que más de 30 estadounidenses están secuestrados actualmente afuera de Estados Unidos.
