El
municipio de Las Terrenas y su entorno
están a punto de vivir una profunda transformación si se cumplen las
previsiones de un grupo de más de 40 empresas e inversionistas locales y
extranjeros, que estudian convertir este espacio en polo de atracción turístico
mundial. Para ello, los promotores, liderados por el ingeniero Maximino Brito, prevén invertir US$ 300 millones en la
construcción de dos campos de golf, diversos proyectos urbanísticos y en un
Plan de desarrollo turístico del territorio.
El proyecto
inversor, cuyo Plan de Desarrollo ya ha sido aprobado, contempla la
construcción de dos campos de golf de 18 y 9 hoyos, respectivamente, que se
integrarán en un entorno inmobiliario que incluye villas, apartamentos y un
hotel. Entre los promotores figuran las sociedades
Cooper & Hrowitz Inc., Caribbean Investment Realty Inc., Century
Homebuilders of South Florida LLC. Y AG
Constantza LLC.
Maximino
Brito explica que los inversionistas pretenden captar un turismo de alto
consumo y básicamente familiar para hacer de Las Terrenas capital del golf del
Caribe, además de promover la proyección turística de la zona e impulsar la
imagen de todos los encantos de su entorno y sus parajes. El objetivo será
captar turismo norteamericano y de países como Alemania e Israel.
Desarrollo del territorio
Uno de
los principales ejes del plan inversor contempla el desarrollo turístico y de
ordenamiento del territorio, con el consenso y la participación tanto de los
ciudadanos como de las administraciones públicas. En este sentido, el proyecto
ya cuenta con el apoyo municipal, liderado por la alcaldesa de Las Terrenas,
Dra. Mariana Vanderhorst, que ha prometido ir de la mano con los promotores
para rediseñar las necesidades de la ciudad.
El plan maestro pasa por
diversas inversiones en la mejora de los déficits de la ciudad, como son los
casos del tránsito, aguas residuales o su sistema sanitario. Brito explica
que el Plan Maestro incluirá las
indicaciones para resolver los diferentes problemas que afectan al desarrollo
turístico del pueblo, empezando por el erróneo sistema de recogida y
almacenamiento de la basura, los cuales no incluyen el sistema diferenciado, o
también el problema de la polución del río y del mar. “Una correcta inversión
de esta dimensión solo se podrá desarrollar en un entorno sano y con un pueblo
ordenado y agradable para los turistas” enfatizó el ingeniero Brito.