El afamado escritor argentino Jorge Luís Borges en uno de sus relatos de su obra ¨ Ficciones ¨ hace referencia a un pensamiento de alta significación que pudiera servir de norte para todos aquellos periodistas que ejercen este oficio.
¨Hay que ver con asombro donde los demás ven con normalidad. Es una reflexión que inspira, una punzada filosófica que alecciona e invita a una visión más profunda, diferente y controversial del ejercicio del periodismo del siglo XXI.
La práctica reporteril en la República Dominicana viene experimentando un descenso preocupante en términos de calidad y compromiso. Caminamos hacia lo fácil, superficial y mercantil y eso no debe ser.
El actual ejercicio periodístico es frío, conservador y superficial, muy alejado de lo que debe ser un periodismo de compromiso y trinchera.
Es increíble como los directores, editores, periodistas y colegas reporteros de los distintos medios de comunicación televisivos, radiales, impresos y digitales se han dejado arropar por esa práctica tan nociva.
Es notorio, por ejemplo, observar que algo tan vital en un hecho noticioso como el rigor, el contraste y seguimiento, estén cada vez más ausente en las historias periodísticas que nos cuentan los medios de comunicación.
Hago énfasis en este tema por el hecho de que resulta inexplicable el extraño silencio mediático que han mantenido los medios de comunicación con temas de interés noticioso para la población.
Por ejemplo, el dar seguimiento a las posibles visitas que pudiera haber hecho el expresidente Danilo Medina a sus parientes en los lugares donde guardan prisión. También, que hay de cierto o falso de la supuesta separación y probable divorcio del doctor Leonel Fernández y la ex vicepresidenta Margarita Cedeño.
¿Por qué ese silencio, que o cuales razones impiden que los periodistas y ejecutivos de medios incluyan en sus agendas este tipo de seguimiento a estas y otros informaciones que le interesan tanto a la población?