“Con gran dolor me entero de las noticias que llegan de Tierra Santa. En particular, la muerte de 10 palestinos, entre ellos una mujer, durante acciones militares antiterroristas israelíes en Palestina, y de lo sucedido cerca de Jerusalén el viernes por la noche, cuando siete judíos israelíes fueron asesinados por un palestino y tres resultaron heridos cuando salían una la Sinagoga”, dijo el papa.
“La espiral de muerte que aumenta día a día no hace más que cerrar los pocos resquicios de confianza que existen entre los dos pueblos. Desde principios de año han muerto decenas de palestinos en tiroteos con el ejército israelí. Hago un llamamiento a los dos Gobiernos y a la comunidad internacional para que encuentren de inmediato, sin demora, otras vías que incluyan el diálogo y la búsqueda sincera de la paz”.