La cantante
Lisa Marie Presley, hija de Elvis y Priscilla Presley (77) falleció este jueves a los 54 años de edad tras sufrir un paro cardíaco que la obligó a ser hospitalizada de urgencia. Ha sido su madre quien ha confirmado su muerte a través de un comunicado a la cadena de televisión estadounidense CNN. "Priscilla Presley y la familia Presley estándesolados por la trágica muerte de su amada Lisa Marie. Están profundamente agradecidos por el apoyo, el amor y las oraciones de todos, y piden privacidad durante este momento tan difícil", reza el comunicado.
Lisa era la única hija del mítico cantante. Cuando Elvis murió a la temprana edad de 42 años, la artista tenía tan solo nueve años y se convirtió en coheredera de su patrimonio, junto a su abuela, Vernon Presley y su bisabuela, Minnie Mae Hood Presley. Con la muerte de ambas, Lisa pasó a ser la única heredera, valorada en más 100 millones de dólares (94 millones de euros). En 2004, Lisa vendió el 85% de Elvis Presley Enterprises (EPE), empresa que controla los derechos y propiedades del mítico cantante.
"Me siento agradecida de poder seguir hoy con vida". Quien hablaba así hace poco más de tres años era ni más ni menos que Lisa Marie Presley, la niña consentida del rey del rock, cuando finalmente decidió abrir su corazón y sincerarse como nunca sobre su adicción a los opioides, un drama del que aseguraba estar totalmente recuperada, pero que le llevó a vivir algunos de sus días "más oscuros".
La hija de Elvis, que ha fallecido a los 54 años a causa de un paro cardíaco, habló de sus adicciones en el prefacio de un nuevo libro de Harris Nelson titulado The United States of Opioids: A Prescription for Liberating a Nation in Pain, en el que reconocía que mucha gente podría preguntarse cómo es posible que alguien que ha llegado a tenerlo todo y que además perdió a gente muy cercana por culpa de estas sustancias acabó cayendo también en el infierno de los opioides.
En el caso de Lisa Marie Presley, como en el de tantas otras personas, comenzó casi sin darse cuenta, cuando a finales del 2008 dio a luz a sus gemelas Vivienne y Finley y los médicos le recetaron unas pastillas para recuperarse de los dolores del parto. Lo que empezó como un remedio que debía ser "a corto plazo", terminó convirtiéndose en una tragedia que duró años.
Su vida, cargando a cuestas con el apellido Presley, no ha sido fácil y no es la primera vez que salen a la luz pública sus problemas con otras sustancias prohibidas. Su primer coqueteo con las drogas fue muy pronto, cuando dejó de ir al instituto y empezó a probar diferentes sustancias. Elvis Presley había fallecido años antes, cuando ella tenía nueve años, y Lisa Marie Presley transitaba por los años de la adolescencia sin un rumbo fijo.
Pero en verano 2020 vivió una de las tragedias más fuertes de su vida, otra más, cuando su hijo mayor, Benjamin, se quitó la vida de un disparo en la cabeza. Fruto del primer matrimonio de Lisa Marie con Danny Kenough, Benjamin había mantenido un perfil bajo a lo largo de sus 28 años y era escasas sus apariciones públicas.