"Prepárense para la celebración del evento más importante del merengue. Este año, el festival Super Mega Ultra Festival Merengazo 2024 se llevará a cabo el domingo 3 de noviembre, ya que el lunes no se trabaja", expresó su creador y productor Luis Medrano.
El escenario será un lujo, situado en el corazón del Parque La Confluencia, donde se encuentran dos ríos, un entorno verdaderamente único en el planeta. El horario será desde las 12 del mediodía hasta las 10 de la noche.
"Esperamos seguir contando con el apoyo y respaldo del presidente Luis Abinader, el sector empresarial de Jarabacoa, del Banreservas, de la Cervecería Nacional Dominicana y del empresariado nacional para hacer de ésta tercera entrega un concierto inolvidable y memorable", dijo el exitoso empresario y productor artístico.
Este evento reunirá a las megaestrellas del merengue, quienes compartirán su música y energía con todos los asistentes, creando una experiencia auténtica e inolvidable.
Se espera que el festival mundial del merengue atraiga a cientos de turistas de todo el planeta, convirtiéndose en el Woodstock del ritmo dominicano. "Usted, lector, tiene que disfrutar de esta experiencia única", agregó Medrano.
La música tropical del Caribe es un lenguaje universal que trasciende fronteras. Sus bailes, movimientos de caderas y pies hablan de felicidad, alegría y sensualidad; así es el merengue. En el corazón de cada melodía, el ritmo juega un papel fundamental en la vida de cada dominicano y dominicana.
Es el pulso que da vida a las notas, el latido que mueve las emociones y conecta a las personas. Cada golpe de tambora, el sonido de la güira, las teclas del piano, el acordeón y cada acorde de guitarra se entrelazan en una danza mágica, transformando el espacio y el tiempo en una sinfonía alegre de trompetas, saxofones y un vibrante bajo, todo ello dando rienda suelta a la vida y al encanto de sentirse vivo al bailar un buen merengue.
Los artistas participantes, cada uno con su estilo único y su historia personal, aportan una chispa de energía que enciende el escenario. Su pasión y dedicación crean una atmósfera electrizante, donde la audiencia no solo escucha, sino que siente y vibra al unísono, entre éxitos y más éxitos.
Cada interpretación es un viaje emocional, una conexión íntima que revela la profundidad del alma humana y su relación con la cultura popular dominicana, la más querida. El ritmo es más que un simple compás; es el motor que impulsa la creatividad y la expresión.
Este festival es un espacio donde la magia se une a nuevos sonidos y a la diversidad cultural folklórica, asegurando que el ritmo nacional nunca pare ni muera. La colaboración entre los artistas en cada acorde crea una sinfonía rica y emocionante que resuena en el corazón de quienes escuchan, llevándolos a cantar, bailar y disfrutar emociones nunca antes vividas.
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