Por. Freddy Fariña
En los últimos años el cambio climático se ha intensificado, evidenciado
por fenómenos meteorológicos extremos, aumento del nivel del mar y cambios en
los patrones de precipitación. La comunidad científica advierte que si no se
toman medidas inmediatas, las consecuencias serán devastadoras para el planeta
y sus habitantes.
Según el último informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático
(IPCC), las temperaturas globales han aumentado en aproximadamente 1.2 grados
Celsius desde la era preindustrial. Este calentamiento está relacionado con el
aumento de gases de efecto invernadero, principalmente dióxido de carbono (CO2)
y metano (CH4), liberados por actividades humanas como la quema de combustibles
fósiles y la deforestación.
Para contrarrestar este cáncer que esta carcomiendo nuestra biodiversidad
amerita de urgentes cambios hacia las energías renovables, invertir en fuentes
de energía limpias como solar, eólica e hidroeléctrica es fundamental para
reducir la dependencia de combustibles fósiles. Los gobiernos deben fomentar
políticas que incentiven estas inversiones.
Tenemos que promover tecnologías y prácticas que reduzcan el consumo
energético en industrias, edificios y transporte puede disminuir
significativamente las emisiones de gases contaminantes. También proteger los
ecosistemas forestales y llevar a cabo proyectos de reforestación son acciones
clave para absorber CO2 y preservar la biodiversidad.
Fomentar el uso del transporte público, bicicletas y vehículos eléctricos
puede reducir la huella de carbono del sector transporte, uno de los mayores
emisores contaminantes. Aumentar la sensibilización sobre el cambio climático
es esencial con programas educativos pueden empoderar a las comunidades para
adoptar practicas sostenibles.
Es crucial que países colaboren a través de acuerdos como el Acuerdo de
Paris para establecer metas ambiciosas en la reducción de emisiones y financiar
tecnologías limpias. La investigación en nuevas tecnologías que capturen
carbono o mejoren la eficiencia agrícola puede ofrecer soluciones viables a
largo plazo. El cambio climático es un desafío global que requiere acción
colectiva inmediata. Adoptar estas alternativas no solo ayudara a mitigar sus
efectos, sino que también promoverá un futuro más sostenibles para las próximas
generaciones.